Dentro de tanto concepto mercadotécnico el Soul Marketing llega para decir presente, y es que con la entrada de Internet el smart consumer ha cambiado las pautas del mercado, sin embargo la evolución continúa y ahora un nuevo nicho de mercado esta solidificándose, y es el consumidor que no depende de las opiniones de otros, son inmunes al marketing de atracción, ya que los contenidos no lo influyen y el social media los aburre, al menos que ellos sean los protagonistas, son generadores de contenidos pero sin tener la intención de serlo, tienen sus mundos completamente definidos y no por corrientes sociales que los han adoctrinado, ni modelos de conducta que los haya atraído, son solo actitud, están orgullosos de lo que son, por consiguiente son únicos, y por ende los generadores del Soul Marketing.

¿Y qué es el Soul Marketing? Es el proceso de identificar y anticipar tus propios valores que te hacen único y los cuales muestras con orgullo, para luego satisfacer las necesidades de terceros que ven en ti el producto que ellos quisieran ser. A diferencia del Branding personal, esta no es una técnica para fabricarte como marca, al contrario es un proceso en el que el mundo te convierte en marca por ser diferente. El branding personal busca realzar lo que esta de moda, para que luego al pasar de moda otro tome la batuta y continúe la extensión del sello heredado, es el clásico ejemplo de los gurús del marketing, donde ellos están de moda y pasan luego viene otro y así en forma constante, pero algo queda, y es el marketing, quien le presta su grandeza a la marca personal impuesta. El Soul Marketing es lo contrario, es llevar el producto resultante al estatus de leyenda, Michael Jordan es un ejemplo ideal a esto, grandes jugadores pasan con un branding personal extraordinario, pero luego viene otro y lo hereda, ¿qué quedó? la respuesta obvia es el baloncesto, sigue ahí, prestando su grandeza para el branding personal de jugadores extraordinarios, pero Jordan, él no paso de moda, el se convirtió en leyenda.

Son personas especiales que se convirtieron en leyendas, entendían lo que eran, estaban orgullosos de lo que hacían y no tenían modelos, ellos eran los modelos de muchos. El soul marketing potencia estas virtudes, otorga las herramientas necesarias para exponer sin viciar los contenidos y otorga sin excesos el espacio multiplicador donde por atracción se crea un mercado objetivo al cual luego se atenderá hasta satisfacer las necesidades de los nuevos clientes que buscan con desespero las marcas patrocinantes que giran alrededor del portador de la actitud generadora.

Soul Marketing, cuando la actitud se impone.